Episodio 02: Überlingen (2002)
El accidente de Überlingen, ocurrido el 1 de julio de 2002, fue una colisión aérea sobre el sur de Alemania entre un Tupolev Tu-154M de Bashkirian Airlines y un Boeing 757 de carga operado por DHL. El impacto resultó en la muerte de 71 personas, incluidos 45 niños que viajaban en el Tupolev como parte de un programa educativo. Este accidente es un caso clave en la historia de la seguridad aérea, pues puso en evidencia los riesgos de la falta de coordinación en el control de tráfico aéreo y el mal uso del sistema TCAS (Traffic Collision Avoidance System).
El desastre se desencadenó cuando ambos aviones se encontraban en rumbo de colisión a 36,000 pies sobre el lago de Constanza. Normalmente, el TCAS, un sistema automatizado que alerta a las tripulaciones sobre posibles colisiones, debería haber evitado el choque. En este caso, sin embargo, la tripulación del Tupolev recibió dos órdenes contradictorias: el TCAS les ordenó ascender, mientras que el controlador aéreo de Skyguide, Peter Nielsen, les indicó descender. Debido a la formación de los pilotos rusos, donde las instrucciones del controlador tenían prioridad sobre el TCAS, decidieron seguir la orden del controlador, descendiendo directamente hacia la trayectoria del Boeing 757.
Mientras tanto, la tripulación del Boeing 757 de DHL obedeció correctamente al TCAS, descendiendo también, lo que provocó que ambas aeronaves convergieran en el mismo punto. A las 23:35, el estabilizador horizontal del 757 cortó la parte trasera del Tupolev, causando su desintegración inmediata. El Boeing, gravemente dañado, también perdió el control y se estrelló segundos después. No hubo sobrevivientes.
La investigación posterior reveló fallos graves en la gestión del tráfico aéreo. Skyguide estaba operando con un solo controlador la noche del accidente, pues su compañero de turno estaba descansando. Además, el sistema de radar secundario y las líneas de comunicación con otros centros de control estaban en mantenimiento, dejando al controlador sin herramientas para detectar el conflicto a tiempo. Cuando Nielsen finalmente se dio cuenta del riesgo, ya era demasiado tarde para evitarlo.
El accidente de Überlingen llevó a importantes cambios en la seguridad aérea. La OACI reforzó la normativa global del TCAS, estableciendo que las tripulaciones deben priorizar las órdenes del TCAS sobre las instrucciones de los controladores en caso de conflicto. También se implementaron mejoras en la gestión del tráfico aéreo, aumentando la supervisión y automatización para evitar situaciones similares.
El impacto humano de la tragedia fue devastador. En 2004, Peter Nielsen fue asesinado por Vitaly Kaloyev, un arquitecto ruso que perdió a su familia en el accidente y buscó venganza al considerar que Skyguide nunca asumió su responsabilidad.
En memoria de las víctimas, se erigió un monumento en Überlingen y otro en el lago de Constanza, recordando la importancia de la seguridad aérea y la necesidad de aprender de los errores del pasado.